¡Los operadores ferroviarios low cost se enfrentan a desafíos en medios de pago!

Las ventas de bienes y servicios a bordo en los trayectos en tren están en aumento. Su creciente popularidad se puede atribuir a los operadores ferroviarios low cost, que se inspiraron en las aerolíneas que han ofrecido compras a bordo durante décadas.

Nacido en los Estados Unidos, el concepto de aerolínea low cost fue popularizado por Southwest Airlines en los años 70. Sus innovaciones incluyen: modelos de aviones únicos, menores costes de mantenimiento, reducción de personal, el uso de aeropuertos secundarios, procesos internos optimizados y tarifas básicas.

Los operadores ferroviarios low cost son compañías que ofrecen viajes en tren a precios más bajos que las compañías ferroviarias tradicionales. Lo logran reduciendo los costes de varias maneras, como mediante el uso de trenes más antiguos, amortizados y menos costosos, tener menos personal y ofrecer menos comodidades a bordo.

Los operadores ferroviarios low cost generalmente operan en rutas de corta a media distancia y pueden tener menos paradas, lo que reduce el tiempo de viaje. A menudo ofrecen billetes online y, a veces, ofrecen descuentos para reservas anticipadas o para fechas de viaje específicas. Los pasajeros generalmente tienen que pagar un monto extra por servicios adicionales como reservas de asientos, comida o almacenamiento de equipaje. Los operadores ferroviarios low cost son populares entre los viajeros preocupados del presupuesto, que están dispuestos a intercambiar comodidad y servicios por precios más bajos.

Así que veamos con mayor precisión los cambios en reducción de costes, que incluyen:

• estaciones secundarias con tarifas más bajas,
• animar a los pasajeros a imprimir sus billetes en casa,
• permitir solo una pieza de equipaje de tamaño limitado,
• optimizar el uso de sus trenes con menos rutas y menos personal a bordo,
• y ofrecer, solo basado en página web, herramientas de autoayuda (es decir, Preguntas Frecuentes) para aliviar la necesidad de la atención al cliente a través de llamadas telefónicas.

Sin embargo, una reducción de costes no significa una reducción en los servicios adicionales. Por el contrario, los operadores ferroviarios low cost ofrecen una serie de servicios complementarios, generalmente ofrecidos a través de un número limitado de comercios. Uno de estos comercios es a menudo el proveedor de catering, que vende alimentos y bebidas en un carro móvil dedicado, que circula dentro del tren. Otro comercio es el mismo operador ferroviario low cost que vende sus servicios adicionales como equipaje adicional, billetes para mascotas, asientos individuales, bicicletas, Wi-Fi o entretenimiento. Estos extras a menudo se venden a través del canal de pago de proximidad, pero algunos también se venden online.

Los operadores ferroviarios low cost se enfrentan a varios desafíos de pago, que incluyen:

• Altas tarifas de transacción: Los proveedores de servicios de pago cobran tarifas de transacción, que, en proporción al precio del billete, puede ser particularmente altas para billetes de bajo coste. Esto puede afectar los márgenes de beneficio de los operadores.
• Prevención del fraude: Los operadores ferroviarios low cost pueden ser más susceptibles al fraude debido al mayor volumen de transacciones online y al menor coste de los billetes. Los operadores deben invertir en medidas sólidas de prevención del fraude para minimizar las pérdidas.
• Opciones de pago limitadas: Los operadores ferroviarios low cost pueden no ofrecer tantas opciones de pago como las compañías ferroviarias tradicionales. Por ejemplo, es posible que no acepten ciertas tarjetas de crédito o métodos de pago populares en algunos países, lo que puede limitar su base de clientes.
• Contracargos: Los contracargos ocurren cuando un cliente disputa un pago con su banco y el banco revierte el pago. Las devoluciones de cargo pueden ser particularmente desafiantes para operadores ferroviarios low cost, ya que pueden resultar en pérdida de ingresos y costes adicionales.
• Pagos transfronterizos: Si los operadores ferroviarios low cost ofrecen servicios en varios países, pueden enfrentarse a desafíos adicionales en lo que respecta a los pagos transfronterizos. Esto puede incluir diferentes regulaciones, monedas y métodos de pago, lo que puede dificultar el procesamiento de transacciones.

En general, vemos que los operadores ferroviarios low cost tienen verdaderos desafíos de pago que realmente pueden afectar su modelo de negocio y rentabilidad. Además, observamos que algunos operadores ferroviarios low cost pueden tener varios proveedores de servicios de pago que manejan todos los diferentes canales de venta; catering manejado por uno, servicios en línea por otro y servicios a bordo por un tercero. Los operadores ferroviarios low cost también pueden usar diferentes bancos adquirentes, agregando otra capa de complejidad al proceso de pago. Esta complejidad es parte del principio de bajo coste o low cost: la adición de un servicio tras otro sin integración completa.

Mediante el uso de varios PSP, la complejidad del procesamiento aumenta para los operadores ferroviarios low cost y se desencadenan muchos desafíos:

• En primer lugar, es difícil analizar el comportamiento y los hábitos de los clientes, para ofrecerles el servicio más adecuado antes, durante o incluso después del viaje.
• Además, desde una perspectiva interna de trazabilidad e informes, trabajar con varios PSPs complica los procesos internos de los operadores ferroviarios low cost, debido al uso simultáneo de varias plataformas de informes.
• Finalmente, cuando varios PSPs comparten los canales online y presencial, los servicios omnicanal tales como de compras online y reembolsos en tienda no son posibles. De este modo, se requiere de mayor comunicación y más procesos a seguir.

Sin embargo, después de integrar varios servicios a su oferta, los operadores ferroviarios low cost se enfrentan a problemas de racionalización para reducir costes. Ahora bien, optar por un PSP único puede reducir el fraude y crear una experiencia de cliente perfecta:

Ahora veamos la parte adquirente.  No es raro ver a los operadores ferroviarios low cost utilizando varios adquirentes. Pero primero de todo, recordemos la misión de un adquirente: es una entidad que captura la transacción de pago de la pasarela de pago, gestiona la autorización y retira los fondos de la cuenta del titular de la tarjeta para transferirlos a la cuenta del comercio. Este último paso se llama liquidación. El adquirente adecuado es el que mejor se adapta a los requisitos de su negocio, por lo que los operadores ferroviarios low cost y otros tipos de comercios deben hacerse las siguientes preguntas antes de elegir un adquirente:

• ¿Qué países y monedas aceptan? Es fundamental que su adquirente dé soporte a los países en los que realiza negocios. Igualmente, es importante que su adquirente admita las monedas utilizadas para vender sus productos y la moneda utilizada para liquidar los fondos.
• ¿Qué tan diversos son los métodos de pago que admiten?  Los clientes esperan pagar con los medios de pago que tienen en el momento de la compra. En un negocio internacional, como las operaciones ferroviarias, es imperativo admitir una amplia gama de tipos de tarjetas, esquemas y métodos de pago alternativos (APM) para satisfacer las expectativas de los clientes.
• ¿Hay tarifas globales? Si es así, demuestra que el adquirente apoya su negocio y que el modelo adquirente se adapta a su negocio.
• ¿Están integrados con mi pasarela de pago? Para acelerar la integración y el Go-To-Market sin requisitos de desarrollo, es más eficiente elegir un adquirente que ya esté integrado con sus pasarelas de pago (comercio electrónico y en tienda física).

Como se ha mencionado anteriormente, a veces vemos que los operadores ferroviarios comerciales y de tipo low cost contratan varios adquirentes: ¿Por qué harían eso?

Hay varias ventajas para un comercio al tener varios adquirentes (procesadores de pagos). ¡Echemos un vistazo a estos y desafiémoslos!

• Mayor capacidad de procesamiento de pagos: Tener múltiples adquirentes significa que un comercio puede procesar más transacciones simultáneamente, lo que puede ser especialmente beneficioso durante los períodos de pico alto del negocio. Sin embargo, muchos adquirentes y especialmente Worldline están dimensionados para procesar un número muy alto de transacciones.
• Reducción del tiempo de inactividad: Si un adquirente experimenta tiempo de inactividad o problemas técnicos, tener múltiples adquirentes significa que el comercio puede continuar procesando transacciones con otro adquirente, reduciendo el impacto en su negocio. Esto podría ser cierto, sin embargo, los adquirentes profesionales ahora lo pueden ofrecer y eso es lo que hace Worldline, ¡una tasa de disponibilidad del 99,995% que evita que el comercio tenga tiempo de inactividad!
• Acceso a diferentes métodos de pago: Diferentes adquirentes pueden especializarse en diferentes métodos de pago, como tarjetas de crédito, tarjetas de débito, pagos móviles o métodos de pago alternativos. Tener múltiples adquirentes permite a un comercio ofrecer una gama más amplia de opciones de pago a los clientes.
• Poder de negociación: Tener múltiples adquirentes puede darle a un comercio más influencia en las negociaciones, ya que pueden optar por trabajar con el adquirente que ofrece las mejores tasas y condiciones. Eso es cierto, sin embargo, lanzar una licitación de adquirencia y elegir un único adquirente probablemente le dará el mismo resultado.

Por otro lado, tener un único adquirente como Worldline proporciona al comercio muchos beneficios:

• Tener un único adquirente significa que un comercio solo necesita integrarse con un sistema de procesamiento de pagos, reduciendo la complejidad y racionalizando el procesamiento de pagos.
• El uso de un solo adquirente puede ayudar a garantizar una experiencia de pago consistente para los clientes, ya que todas las transacciones se procesarán a través del mismo sistema.
• Con un único procesador de pagos, conciliar transacciones y administrar datos de pago puede ser más simple y directo.
• En muchos casos, el uso de un único adquirente puede conducir a tarifas de procesamiento de pagos más bajas, ya que el comercio puede negociar mejores tarifas comprometiéndose con un solo proveedor.

Finalmente, al trabajar estrechamente con un único adquirente, un comercio puede desarrollar una relación más sólida y disponer de un soporte y servicio más personalizados. Esto es lo que Worldline proporciona a sus clientes, no solo para la adquirencia sino también para la aceptación, lo que significa que con Worldline obtendrá un único contrato y un simple punto de contacto.