En un mundo en el que el comercio global es la norma, tratar con múltiples divisas puede resultar desalentador. Sin embargo, una estrategia que ha demostrado su eficacia para simplificar las transacciones internacionales es la conversión dinámica de divisas (DCC).
Analizando el DCC
El DCC no es una novedad financiera, sino un servicio de pago establecido que los retailers adoptan cada vez más. Se trata de un servicio opcional ofrecido en el punto de venta, que permite a los clientes realizar el pago sabiendo el coste de sus compras en su moneda de origen. Esta facilidad permite a los comercios ofrecer a los clientes internacionales un servicio sencillo y transparente que se adapte a ellos y, al mismo tiempo, complementar su margen mediante comisiones adicionales, sin incurrir en ningún gasto extra.
Aunque el DCC ofrece muchas ventajas, es crucial responder a las preocupaciones de los consumidores sobre los márgenes ocultos y los tipos de cambio poco competitivos. Los comercios que ofrecen DCC deben asociarse con procesadores de pagos de confianza que ofrezcan una garantía de mejor tarifa. Los consumidores también deben comprobar los tipos de cambio en el punto de venta y compararlos con los ofrecidos por el emisor de su tarjeta para garantizar un trato justo.
En este blog, exploraremos las ventajas de la DCC para comercios y consumidores, arrojando luz sobre cómo este servicio puede repercutir positivamente en las empresas y mejorar la experiencia del cliente.
I. Ventajas para los retailers:
1) Incremento de los ingresos
El DCC ofrece a los comercios una fuente de ingresos rentable. Cada transacción de este tipo contribuye de forma efectiva al reembolso del comercio, ya que es el terminal a través del banco adquirente del comercio el que realiza la conversión de divisas, en lugar de ser el banco emisor de la tarjeta del cliente. Los comercios se benefician de unas comisiones de transacción más bajas. El ahorro resultante de estas comisiones reducidas puede reinvertirse en el negocio, fomentando un mayor crecimiento y rentabilidad.
Este potencial se ve respaldado por nuestra evaluación de datos, que revela que, entre los comercios Tier 1 – que gestionan millones de transacciones al año –, alrededor del 1% de los consumidores que pagan con tarjeta cumplen los requisitos para acogerse al DCC, este porcentaje puede incrementarse dependiendo de si es un país con un alto nivel de tarjetas susceptibles de DCC. Suponiendo una tasa de conversión conservadora del 25%, con uno de cada cuatro de estos clientes aceptando la oferta de DCC, estos datos ponen de manifiesto el significativo margen de ganancias financieras.
Configuración
DCC tiene una clara ventaja en la facilidad con la que se integra en los sistemas existentes. A diferencia de otras herramientas financieras que pueden necesitar infraestructura adicional, DCC sólo necesita configuración en el terminal de cobro, haciéndose transparente a los sistemas de ventas del comercio. Este aspecto simplifica el proceso de implantación para los comercios, eliminando la necesidad de costosas y lentas actualizaciones de la infraestructura.
2) Ventaja Competitiva
Los merchants deben diferenciarse para destacar. Ofrecer DCC puede ser una propuesta de venta única que distinga a un comercio de sus competidores. Atraer a clientes internacionales con opciones de pago adaptadas puede dar a un retailer una ventaja diferencial y abrirle las puertas a nuevos clientes, mercados y oportunidades. También puede aplicarse sin problemas en el ámbito digital como eDCC, estableciendo así una experiencia omnicanal integral.
3) Mayor satisfacción del cliente
Con el DCC, los clientes pueden tomar decisiones con conocimiento de causa a la hora de elegir su moneda de pago, bien sea la del país donde esté o la de origen de su tarjeta . Como el terminal actualiza diariamente los tipos de conversión de divisas, garantiza que tanto los comerciantes como los clientes realicen transacciones con los tipos de cambio más justos y atractivos. Esta actualización automática proporciona igualdad de condiciones, lo que permite a los clientes elegir con confianza su moneda de pago y a los merchants ofrecer tipos de cambio competitivos.
II. Ventajas para los consumidores:
1) Transparencia y comodidad para los viajeros
DCC proporciona transparencia y comodidad más allá de lo que pueden ofrecer las transacciones tradicionales en divisas. Al comprar en un país extranjero, los clientes conocen el importe exacto que pagarán en su moneda nacional en el momento de la compra, sin recargos ocultos y con la garantía del mejor tipo de cambio. Esta transparencia elimina las sorpresas y garantiza una comprensión clara de los gastos. Si el usuario rechaza DCC no sabrá lo que va a pagar por el cambio de moneda cuando llegue a su país de origen, con DCC lo sabrá al instante.
Además, la visibilidad de los gastos en tiempo real también resulta ser una herramienta de gran valor para quienes viajan por trabajo con frecuencia. Al implantar DCC, estos pueden controlar y conciliar fácilmente sus gastos sin el retraso asociado a la entrega tradicional de extractos. Este sistema de gestión de gastos fluido e intuitivo permite a los merchants ofrecer transacciones financieras eficientes a sus respectivos clientes.
2) Evitar la doble conversión
Sin DCC, los clientes podrían enfrentarse a un proceso de conversión de divisas en dos pasos. Por ejemplo, si un cliente utiliza una tarjeta de crédito de su país de origen para una compra internacional, el banco emisor podría convertir primero la transacción a la moneda local y luego volver a convertirla a la moneda nacional. Esta doble conversión puede dar lugar a comisiones adicionales y tipos de cambio desfavorables. DCC elimina esta doble conversión, garantizando a los clientes el tipo de cambio más justo al comprar.
En conclusión, DCC sobresale como una herramienta poderosa en el comercio global, aportando ventajas a merchants y consumidores. Para los merchants, DCC ofrece una oportunidad para impulsar los ingresos, agilizar las operaciones, obtener una ventaja competitiva y mejorar la satisfacción del cliente – todo sin requerir grandes cambios de infraestructura. Los consumidores aprecian la transparencia, la conveniencia, y la visibilidad del gasto en tiempo real, que es especialmente beneficioso para quienes viajan por trabajo con frecuencia. Adicionalmente, DCC elimina los riesgos de la doble conversión, asegurando que los consumidores reciban siempre las tasas de conversión más justas.
Los merchants deben colaborar con procesadores de pago reconocidos, y los consumidores deben mantenerse informados sobre las tasas de conversión en el momento del pago. Abordando la preocupación de los consumidores y prestando servicios claros, justos y transparentes, DCC tiene el potencial de mejorar y potenciar las transacciones internacionales, haciendo que sean más eficientes y fáciles de usar. A medida que el comercio global continúa evolucionando, estrategias como DCC tendrán un rol imprescindible en la simplificación y la mejora de la experiencia, tanto para retailers como para consumidores.